Y LLEGÓ...
Esperaba detrás de la puerta, con ese aspecto tan serio, tan maduro,tan hombre... y tan TIERNO.
Con una rosa en la mano (limpia de espinas), me la dió casi sin mirarme, con cierta timidez y la ternura me embargó de pies a cabeza
... Y SE FUÉ.
Mis piernas están algo adormecidas, mi intimidad con el recuerdo de una "visita intensa". La sensación es de un cansancio muy agradable.
Mi cama aún sin hacer... Esta noche dormiré con tu olor.
Esa rosa, con la misma frescura con que llegó esta mañana de tus manos, de tu tierra, de tu jardín... Se ha hecho la protagonista de ese espacio, la miro y siento que me sonrie, se siente a gusto aquí a mi lado, sabe que su dueño, que la ha mimado, y cuidado hasta verla crecida; la ha dejado en buenas manos. Cuando se apague, pondré sus pétalos entre algunos de mis libros favoritos en honor a tí, a nosotros...
5 comentarios:
Pero de alguna manera está no?
yo quiero algo así!
Besos guapísima!
Hay que ver cuanto da de sí aquella frase de Gertrude Stein, una rosa es una rosa es una rosa...
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Qué bonito Kether, qué bien sientan esas visitas... ojalá te de oxígeno hasta la próxima flor...
Un beso
si Anita, de alguna forma está. Sobre todo en el recuerdo, pero... uff! que miedooooooo
Detective,cualquier recuerdo de un agradable momento da para mucho. No sabía que la frase era Gertrude Stein, recordaba la canción de mecano... gracias por la información.
Glora, me dejó oxígeno,ilusión, relax, y melancolia; mereció la pena. Aunque hay cierta mezcla de alegria y miedo por "engancharme" demasiado...Mi corazón es débil.
Besos para los tres.
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