Tus hijos, no son tus hijos.
Son los hijos de la vida.
Vienen a través de tí, pero no te pertenecen...
Celia con sus ojos miel. Llegó a este mundo una madrugada de octubre, fué un parto difícil pero era un bebé fuerte y aguantó como una campeona el parto duro y penoso.Siempre ha sido una niña muy independiente, tiene un don especial para ganarse a la gente. Es desordenada, anárquica y muy muy dulce... Canta como los ángeles, baila y se mueve con una gracia innata.
Adora el mundo de la interpretación, es complicado pero siempre la animo y le digo que se prepare con entusiasmo y que luche por lo que crea. Siempre la voy a apoyar.
Marina, es la mayor. Nació una noche fría de diciembre, llegó muy de prisa y nadie nos acompañaba...solo la matrona que a duras penas se preparaba para recogerla. Marina es guapa, seria y muy responsable. Preocupada por problemas sociales ya desde muy pequeña, defensora de cualquiera que ella sienta indefenso o más vulnerable. Y una trabajadora incansable. De mayor quiere ser psiquiatra y ya anda haciendo medias con sus notas para ver si le llega (y le llega de sobra, pero ella sigue intentando superarlas aún más). Se que lo conseguirá y será buena porque tiene ese don de saber escuchar, de ponerse en la piel del otro.
1 comentario:
Qué bonito Kether, me he emocionado leyéndote... probablemente porque yo también soy madre y sé de lo que hablas.
Eres valiente... yo no me atrevo a publicar fotos mías o de mis hijos...
Tus hijos tienen también su tesoro, que eres tú.
Un abrazo y feliz verano
Pd. ¿Ya sabes qué destino tendrás el próximo curso?
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